domingo, 24 de junio de 2012

Verso y Silencio


Por la piel reseca, el sentir tibio entre mis piernas.
la cara arrugada, el corazón herido y curado mil veces
por el dolor de la enfermedad, las penas compartidas
y el olor de tu andar junto al mío, otras mil veces.
Por la voz de Paul McCartney y la de Jhon Lenon,
las frases de Cabral y los sueños de los que estuvieron,
por la guitarra excitada de Eric Clapton
y las enseñanzas de mi tío,
por el sentir de mis manos al contacto con la tierra
por los colores y las brisas, por el ardor de ser ultimo y primero,
los ritmos y cantos de protesta,
algún verso enamorado de mi puño, de mi letra
por el latir incesante de mi sien, mis dolores de cabeza.
por la siluetas de mi martirio y el abrir crujiente de mis venas
por cada copa rota, idea suelta y desenvuelta; por el  sabor a sal
el calor de playa, el  frío de paramo, por el  amor al mar.
Por lo maldito de esta existencia, por lo crudo  de la realidad
por vos y por el mal, por lo más asqueroso de mi propio ego
por  mi veneno y el vuestro por todo aquello, por cada riesgo
por un instante consigo ser verso y silencio.

Por la risa sonora buscando el sarcasmo
como una mejilla húmeda después de un beso
por las cartas y las tabernas baratas la cerveza
y el humo entre de los cigarros,
por la historia de todo un pueblo mestizo,
que aveces es indio aveces es europeo,
libertad conquistada a base de fuego, sangre y dolor
por mi abuela María quien me enseñó
que un hombre solo es hombre, cuando intenta ser mejor.
Por el mal camino y las amistades
el dolor zigzagueante de mi pasado
el adiós de mi madre sin despedirse
a los dos años de mi infancia por vos
y por el mal, por lo más asqueroso de mi propio ego
por mi veneno y el vuestro por todo aquello,
por cada riesgo por un instante consigo ser verso y silencio.

domingo, 10 de junio de 2012

Tu revolución


A veces el romanticismo se fuga, por espacios diminutos en cuestión de segundo desaparece a la velocidad que apareció; a veces las cosas tan solo pasan y es mejor no  buscar explicación.
A veces el infierno se ve tan placentero, ser un pecador es una bendición, la condena eterna a cambio del goce carnal y terrenal.
En esos momentos en el que la variabilidad de la existencia tiene una extensa gama de posibilidades, se puede decir que soy yo en mi totalidad, soy dueño de mi camino, el problema en ese momento es cuestión de decisiones.
Dentro de mi llevo tu revolución, esa sonrisa cuarteada a media luz; llega a mí la calma y me pierdo en los sonidos de los pequeños tacones, de la lluvia al contacto con el pavimento y esa fama especial que tiene el mundo en su continuo flujo, es como aprender a ser más sabio, esa es tu revolución la que ha dejado estragos de fe, miradas picaras al abrir los ojos al amanecer, el morder suave de mis labios maquinando alguna ciencia imperfecta, tal vez no lo entiendas como lo hago yo pero lo resumiré de forma muy simple. Mi mundo se alimenta de tu revolución.

Manos


Mis manos, esas carbonizadas extremidades,
esas herramientas solitarias,
intimas compañeras,
luces en momento de oscuridad,
las propietarias de mi guitarra y mi música.

Hechas para acariciar,
para rodar por el mundo sintiendo,
rascando, golpeando, manipulando,
escribiendo, hurgando, atrayendo,
alejando, moviendo un poco del mundo.

Mis manos, carne y hueso
suciedad y movimiento,
temblores, sudores,
inquietudes en  los bolsillos.

Mis manos, herramientas,
Alma, carne y hueso.